Como venimos tratando ya en artículos anteriores sobre el Estándar PassivHaus, uno de los factores más importantes, sino el principal, para lograr una vivienda eficiente energéticamente e incluso la Certificación en el Estándar PassivHaus, es el aislamiento térmico.
1.- Aislamiento térmico
Un edificio con una envolvente bien aislada frente al frío y frente al calor, asegura un elevado confort interior, y puede llegar a ahorrar hasta un 90% de su consumo energético respecto a edificios convencionales actuales.
El aislamiento térmico es fundamental, no solo en los climas fríos, sino también en los climas cálidos, para proteger contra el calor y reducir las emisiones de CO2 generadas por los edificios. Según datos del IDAE, la climatización supone casi el 40% del consumo energético de un edificio residencial, y un buen aislamiento térmico puede eliminar casi por completo ese consumo de climatización.
Uno de los materiales que más influye en el comportamiento final de un cerramiento es el aislamiento, debido a su alta resistencia térmica que impide que entre o salga el calor. Su posición dentro del muro es determinante para el buen funcionamiento térmico del elemento constructivo.
2.- Posición del aislamiento térmico dentro del muro
En climas cálidos siempre es aconsejable colocar el aislamiento en el exterior y tener la inercia térmica en el interior. La inercia térmica es la capacidad del material de almacenar calor, y es fundamental porque garantiza la estabilidad de la temperatura interior e independencia de la fluctuación de la temperatura en el exterior.
Para lograr que los edificios funcionen de forma pasiva, conservando el frío o el calor gracias al aislamiento térmico, es fundamental definir la envolvente térmica, y conseguir una capa de aislamiento continua, ya que las discontinuidades suponen puentes térmicos que provocan una pérdida de energía considerable.
Además de la continuidad, también es importante el espesor del aislamiento. El estándar PassivHaus no exige un espesor de aislamiento, sino que limita las demandas de calefacción, refrigeración, energía primaria y estanqueidad. Según el estudio Passive-On, realizado por el Passive House Institute, se recomienda en España un valor de U (Transmitancia térmica) de 0,3 W/m2K, para alcanzar la relación óptima de eficiencia. En la siguiente tabla se muestran los espesores necesarios según los distintos materiales para alcanzar este valor:
| MATERIAL | TRANSMITANCIA TÉRMICA (W/m2K) | ESPESOR NECESARIO PARA U=0,3 W/m2K (m) |
| Hormigón |
2,30 |
7,30 |
| Tabique macizo |
0,80 |
2,50 |
| Tabique aligerado |
0,40 |
1,25 |
| Madera conífera |
0,13 |
0,40 |
| Paja |
0,055 |
0,18 |
| Aislamiento estándar |
0,040 |
0,13 |
| Aislamiento mejorado |
0,025 |
0,08 |
Se puede apreciar que para tener espesores racionales es imprescindible emplear aislamiento térmico. Es por este motivo, que el aislamiento térmico se convierte en el aspecto más fundamental para un notable ahorro energético.
En un artículo anterior se trató el tema de los aislantes térmicos, en el que se exponían los diferentes aislantes térmicos desde varios puntos de vista: Los mejores aislamientos térmicos para una reforma ecológica
En la imagen siguiente se muestran los valores de transmitancia térmica (W/m2K) estimados de los aislantes térmicos de los diferentes cerramientos, para conseguir un aislamiento térmico eficiente que consiga cumplir con los criterios del Estándar PassivHaus.
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