Hoy os traemos 5 razones por las que Mario Bros, el fontanero más famoso de la galaxia, te aconseja reformar la fontanería de tu vivienda. Si no quieres perder tiempo, dinero y salud con la fontanería de tu vivienda te aconsejamos que sigas leyendo.
Una de las dudas más grandes que se tienen a la hora de encarar una reforma siempre es si se debe sustituir la instalación de fontanería de tu vivienda, una parte o no tocar nada.
1.- Reformar la fontanería de tu vivienda: Por mantenimiento
El paso del tiempo es inevitable. Las cosas se estropean, los materiales se agotan, las instalaciones fallan, etc. En España en el mantenimiento de viviendas y edificios existe una cultura de mantenimiento correctivo (las cosas solo se arreglan cuando se rompen) pero nos ahorraríamos mucho tiempo y dinero si realizáramos un mantenimiento preventivo (arreglar y mantener antes de que aparezca una avería) El mantenimiento preventivo es el que se realiza en los coches. Nadie espera a tener un accidente con el coche para cambiar una pieza o realizar una revisión. Además todos los países avanzados realizan mantenimiento preventivo en sus edificios con planes de mantenimiento porque se ahorra.
Dicho esto, si tu vivienda tiene más de 15 años y vas a realizar una reforma importante es muy posible que te compense reformar la fontanería y evitar daños y gastos en los próximos años.
2.- Reformar la fontanería de tu vivienda: Para ahorrar
No tiene ningún sentido que una vez que vas a gastar cierta cantidad de dinero en el cambio de la parte exterior o revestimiento y acabados de las paredes y suelos, realizando un nuevo alicatado o pavimento que se pretende que tenga bastantes años de duración, no se ejecute el cambio de instalación de fontanería por ahorrarse una mínima cantidad económica.
A medio plazo esta estrategia de no sustituir las instalaciones resulta mucho más caro, ya sea tanto en su vertiente económica como a nivel de molestias por las nuevas obras y reparaciones.
Por poner un ejemplo, la reparación de cualquier avería (que no olvides que siempre será un parche) supone el desplazamiento de al menos un albañil y un fontanero, más materiales y puede alcanzar el precio de 350 euros
Sin embargo, el costo medio de la renovación de una instalación de fontanería en una cocina puede estar alrededor de 450 € (instalación nueva para fregadero, lavavajillas y calentador).
3.- Reformar la fontanería de tu vivienda: Por confort
Los cambios en la distribución del mobiliario en la cocina o los sanitarios en el baño, o la introducción de nuevos elementos que necesiten agua (como es el caso de algunas neveras) nos obliga a modificar la instalación. Casi siempre es más fácil hacer una nueva instalación que realizar la modificación a partir de la antigua instalación, además la modificación no es nada recomendable por la posible mezcla de diversos materiales en una misma instalación.
Consejo: Si en una misma instalación se juntan dos metales diferentes: cobre y acero, se produce el efecto de par electrolítico. Estos dos metales no deben estar nunca en contacto pues es seguro que la corrosión avanzará en poco tiempo. Tan solo si una partícula de cobre arrastrada por el agua se deposita en las paredes de la instalación de acero, el deterioro es inevitable.
4.- Reformar la fontanería de tu vivienda: Por higiene y salud
La instalación de fontanería es una de las más sensibles a problemas de higiene y salud, transmisión de enfermedades respiratorias, plagas, alergias, asma, etc. Aunque no se haya manifestado ninguna avería, humedad o daño, ¿Imaginas como están tus tuberías después de años de uso? El desgaste, la oxidación, la humedad y la suciedad son inevitables, además son un foco de plagas y enfermedades. Si te gusta tener una vivienda limpia y pintas tu casa cada cierto tiempo, si te metes a una reforma lo mejor que puedes hacer por tu salud y la de los tuyos es cambiar la instalación de fontanería. Con mucho más motivo si sufres alergias o problemas respiratorios.
5.- Reformar la fontanería de tu vivienda: Nuevas normativas
En materia de fontanería, hay que saber que la normativa actual prohíbe el empleo de materiales como el plomo o el hierro galvanizado en las instalaciones.
También la normativa obliga a realizar la fontanería por falsos techos (escayola o yeso laminado, comúnmente llamado Pladur), evitando ejecuciones por el suelo, excepto saneamiento de baño y cocina. Otro aspecto normativo a tener en cuenta es que cada cuarto húmedo de la casa (baños y cocina), tiene que tener sus propias llaves de corte (agua fría y agua caliente) para independizar instalaciones en caso de avería u obra.
Siempre que sea posible, lo más recomendable es colocar la tubería por el techo y bajarla a los punto de agua, para en caso de avería, el daño sólo nos afecte a nosotros y sea más fácil y económico el posible arreglo. Simplemente con este “truco” de realizar la instalación de fontanería por el falso techo, nos podemos ahorrar una gran cantidad de dinero y disgustos, ya que la mínima fuga o escape de agua es muy visible y podemos actuar con rapidez.
Para más información consulta a los profesionales las empresas de fontanería y fontaneros.
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